Con 15 años y cursando el cuarto año de la secundaria en el Colegio Presbítero Pérez Hernández, Agustín Pontoriero buscó un tema poco común para presentar su proyecto.
“Me pareció interesante marcar las diferencias entre un eclipse solar y uno lunar, ya que varias veces escuchamos sobre estos eventos y los vemos, pero no conocemos mucho sobre ellos. Traté de explicar para que todos entiendan y que pudiesen a su vez recrearlo en su casa”, destaca Agustín, quien se enteró del concurso por las redes.
El ganador agrega que su mamá lo ayudó a organizar la información y a filmar. El proyecto le enseñó que siempre se puede seguir aprendiendo. “De este proyecto no solo aprendí más sobre el contenido en sí, sino el desafío de transmitir el conocimiento”, manifiesta.
Su futuro parece estar ligado a la medicina y su tiempo libre lo ocupa en el hockey sobre patines, su otra pasión.
En cuanto al haber participado del concurso resalta el tener mucho orgullo y alegría al haber ganado. Es un hermoso resultado que comparte con su hermano pequeño, que no pudo quedar seleccionado.
