Cada acción pública llevada adelante por parte del Estado provincial tiene por objetivo garantizar el cumplimiento de los derechos de cada sanjuanino y sanjuanina, concretando diferentes tipos de herramientas de inclusión.
En este sentido, el Estado provincial en sus políticas inclusivas, uno de sus ejes de gestión, junto al Ministerio de Desarrollo Humano y Promoción Social a través de la Dirección de Personas con Discapacidad, concretó la entrega de cinco triciclos adaptados para personas con alguna discapacidad motriz, quienes podrán mejorar su calidad de vida.
Justamente los triciclos adaptados (hand bike, en inglés), son indispensables ya que ayudan a superar limitaciones, como así también son herramientas de trabajo, estudio y/o recreación. Tienen además el propósito de estimular la autonomía y alentar una mejor calidad de vida, pudiendo movilizarse independientemente.
Esta herramienta es fabricada por emprendedores sanjuaninos que se dedican exclusivamente a la fabricación de forma adaptada a cada caso en particular.
Joaquín Suarez Richarte, de 12 años, del departamento de Pocito, nació con una parálisis cerebral afectándole su parte motora, pero desde muy temprana edad y gracias al acompañamiento de sus padres realiza rehabilitación y pudo acceder a un triciclo.
Emocionada por esta nueva realidad para su hijo, Carolina, mamá del beneficiario, expresó: “Es muy importante para él, para continuar con su rehabilitación desde lo aeróbico. Hemos hecho un camino muy arduo para llegar hasta acá. Esto es inclusión para mi hijo. Joaquín no puede correr ni saltar, por eso la importancia de contar con esta herramienta. Ya pienso en el momento cuando se sume a sus amigos del barrio o con sus hermanos, en su propia bicicleta”.
El propio Joaquín comentó sus sensaciones tras esta nueva oportunidad. “Esperé mucho esto y ahora sé que voy a poder hacer un montón de cosas nuevas como salir a andar con mi hermano o jugar con mis amigos. Tengo muchas ganas de subirme, usarla y disfrutar, divertirme. Me gustaría ir a la plaza del barrio y hacer deporte. Estoy muy feliz”.
Otra de las historias de inclusión en la jornada es la de Mario Alberto, de 41 años. “Es el comienzo de un nuevo proyecto de panificación que tengo para mi familia, por eso quiero agradecer al Gobierno por esta oportunidad”, comenzó emocionado. “Hace 13 años perdí mi pierna y junto a mi mujer, llevamos nuestros cuatro hijos al colegio. Todo nuestro sacrificio es pensando en ellos, su futuro”, agregó.
A su vez, Alberto expresó que “solicité ingresar al programa “Sin Límites” por mi proyecto de panificación, para acceder a los elementos necesarios para su desarrollo. El objetivo es elaborar pizza, panificaciones dulces como medialunas, vender y vivir de eso. Es de toda la familia y soñamos que se nos dé pronto”.
Por su parte, Bautista Ismael Gallardo de 11 años, de Rawson, nació con una parálisis cerebral que lo mantuvo con una silla de ruedas postural durante mucho tiempo. Gracias al acompañamiento de su madre y hermanos en el proceso de rehabilitación, Bautista utilizará el triciclo para continuar rehabilitando los músculos de las piernas, como también poder desplazarse de manera independiente. “Estoy muy contento porque podré ir a la plaza y acompañar a mis hermanos a diferentes lugares que antes no podía”, señaló Bautista.
Milena Celeste Arroyo, de 19 años, del departamento de Angaco, nació con una parálisis cerebral, y desde los 4 años comenzó con tratamientos de rehabilitación. En la actualidad realiza deporte adaptado, lo que genera una mayor independencia y autonomía. Mientras que, Miguel Ángel Torres, de 54 años, sufrió en el 2019 una amputación de una de sus piernas producto de diabetes, ocasionándole la pérdida de su trabajo y la movilidad. En la actualidad posee un emprendimiento con su esposa de panificación, lo que el triciclo le permitirá el traslado y la comercialización de sus productos en diferentes zonas.
