Se realizó con gran éxito el worshop Anima Animal, encabezado por el creador y protagonista, Herman Cornejo. El Teatro del Bicentenario, complejo dependiente del Ministerio de Turismo y Cultura provincial, invitó al encuentro que se realizó en la Casa de San Juan en Buenos Aires, que tuvo una nutrida asistencia de público joven, entusiastas de la danza y periodismo especializado.
La charla estuvo destinado a conocer detalles de la génesis de este primer espectáculo propio del destacado bailarín, First dancer del American Ballet Theatre por 20 años, que traerá a Cornejo, junto al Grupo Cadabra dirigido por Anabella Tuliano al Teatro del Bicentenario por primera vez y nada menos que para el estreno mundial de su obra. Será el próximo 2, 3 y 4 de diciembre (entradas en venta).
‘La idea principal era estrenarlo en la Argentina porque (es una temática que) pertenece a este país y el Teatro del Bicentenario fue el primero en ver que lo podía hacer y el primer llamado que tuve a través de Anabella (Tuliano). El Teatro del Bicentenario nos abrió las puertas ampliamente y puso a disposición el teatro entero; entonces, no había forma de no estrenarlo en San Juan. Lo conocí por videos: la infraestructura, la tecnología que tiene y los directores que tiene, es la clave de por qué funciona el Teatro y por qué está obra va a estrenarse allá” dijo Cornejo sobre su decisión de traer al TB su primera creación.
Patricia Casañas, periodista especializada en danza, moderó el encuentro y también fue la responsable de relatar con exquisitos detalles la historia de cómo el gran Vaslav Nijinsky y Les Ballet Russes, su influencia en la danza argentina. Cómo toma contacto y les dice que sí a los creadores de ‘Caaporá’, un proyecto creado en 1915 por Alfredo González Garaño y Ricardo Güiraldes, en base a la leyenda del pájaro Urutaú.
Así, a su turno, el creador y protagonista de Anima Animal, Herman Cornejo, contó cómo durante la pandemia se dedicó a ahondar en esa historia, en esa conexión que tenía con Nijinsky y como en 2021 recibió una beca del Centro del Ballet y las Artes de la Universidad de Nueva York por su propuesta “Re-imaginando Nijinsky”, con lo empezó todo.
Cornejo dijo que para su obra buscó “entender la conexión que tenían las tribus con la Tierra, la espiritualidad, el respeto por las estrellas y entonces crear una nueva historia trayendo estas inspiraciones, pero expresando la verdadera esencia de los indígenas y traer al escenario el mensaje del cuidado de la Tierra”.
Por su parte, la destacada coreógrafa, directora y fundadora de Cadabra, resaltó el entendimiento que tuvieron con Cornejo para comenzar a trabajar en la creación de la coreografía.
"Que la técnica de Anabella, con su forma contemporánea de coreografiar que se mezclara con mi técnica clásica, lo mismo quería con la música, esa fusión, un gran experimento", afirmó Cornejo, resaltando el trabajo que hicieron en la partitura de este ballet la compositora clásica Noelia Escalzo y el compositor electroacústico Juan María Maurette (Uji). Ambos estuvieron presentes, Noelia desde Córdoba y Uji en el lugar, y dieron detalles de la creación de la música de Anima Animal.
Fue un gran encuentro en el que primó el entusiasmo y la energía de todos los que fueron parte.
