Tras el convenio firmado por el Ministerio de Desarrollo Humano y Promoción Social, a través del Observatorio Social, con la Dirección de Protección al Preso Liberado y Excarcelado, dependiente de la Secretaría de Estado de Seguridad y Orden Público, mujeres privadas de su libertad realizaron su primera salida de a la Casa natal de Domingo Faustino Sarmiento.
Se trata de un convenio que tiene como objetivo la elaboración de un plan de trabajo conjunto para desarrollar herramientas para la reinserción social de las personas en conflicto con la ley penal. En ese marco, se realizó esta actividad, donde 13 mujeres participaron de una acción pedagógica en el acompañamiento que realiza el programa Pro Huerta.
El programa Pro Huerta, busca lograr la disponibilidad de alimentos saludables y nutritivos durante todo el año, contribuyendo a la seguridad alimentaria. Para ello, se llevaron a cabo capacitaciones, para la realización de huertas familiares y la importancia del consumo de frutas y verduras, como así también la entrega de semillas propias de la estación.
Cabe destacar que este programa pretende aportar productos frescos y sanos, que permiten un mejor equilibrio de la dieta de las personas que los consumen. A la vez, la inocuidad de los alimentos que ingieren dando seguridad alimentaria en cada familia.
Resulta ser un proceso gradual y flexible que permite a la persona que está en la cárcel avanzar paulatinamente hacia la recuperación de su libertad, viendo estas actividades desde un enfoque de derechos humanos.
Mediante este trabajo articulado y el nuevo enfoque, es que desde el área se propuso trabajar articuladamente con diversos sectores, buscando ser un disparador de reinserción social. Este convenio implementará acciones conjuntas entre las áreas, con el fin de generar políticas públicas de manera eficiente, que garanticen la protección y el respeto de los derechos humanos.
Este programa les permite acceder a los talleres a través de un seguimiento del equipo técnico del área, logrando de esta manera espacios de empoderamiento y reconocimiento de las potencialidades que cada una de las mujeres.
En este sentido, el Estado busca invertir en programas de reintegración social, para prevenir la reincidencia y contribuir a la seguridad pública, esto busca ser una experiencia trasformadora, logrando aportes para el desarrollo sustentable de los sujetos de derecho.
