El Abierto de la República lleva el nombre de “Pablo Tabachnik”

Se disputa en el CeNARD y el sanjuanino será el gran agasajado en su retiro del Tenis de Mesa.

A sus 44 años, la leyenda del tenis de mesa argentino, comunico su retiro del profesionalismo, será en el Abierto de la República, su última función, torneo que lleva su nombre, y que se disputa del 16 al 20 de diciembre, en el CeNARD.

El “Maestro” del tenis de mesa argentino, esa es la mejor definición, entre tantas otras, que mejor le puede caber a Pablo Tabachnik que, a sus 44 años (20 de noviembre de 1977), dejará de jugar competitivamente al tenis de mesa para ocuparse de un nuevo rol, el de entrenador.

Sus inicios en este deporte fueron en el negocio de su abuelo, en una maderera ubicada en calle General Acha. “Ahí descubrí, junto a mi hermano y unos amigos, una mesa de ping pong guardada en el negocio; la sacamos y empezamos a pelotear un poco. En este lugar hacíamos travesuras de chicos, jugábamos al fútbol, andábamos saltando entre las maderas, todavía recuerdo el olor a aserrín”, comentó.

Luego de jugar al tenis de mesa en el negocio de su abuelo, empezó a practicar en Estudiantil con 11 años en compañía de su hermano Gustavo. Luego pasó al Sporting Estrella, no sin antes jugar al fútbol en Sportivo Desamparados, y al básquet y al vóley en sus ratos libres.

Alumno en la primaria de la Escuela Antonio Torres y en la secundaria del Colegio Central Universitario, a los 12 comenzó a viajar para participar en campeonatos argentinos. El primer título nacional llegó dos años después, en un torneo nacional que se jugó en Mina Clavero en categoría Sub 14. “Iba a la escuela y no era muy prolijo, era buen alumno pero hacía travesuras. Varias veces mi papá visitó la dirección porque rompía un vidrio o me peleaba con un compañero. Igual trataba de ser aplicado porque tenía que viajar mucho a jugar torneos y me cuidaba con las faltas”, indicó.

En 1993 Pablo vivió su año de gloria tras consagrarse campeón argentino juvenil en Rosario y campeón sudamericano en Brasil. También pudo coronarse en un torneo latinoamericano en Cuba al año siguiente, todos en modalidad individual.

Su primera experiencia olímpica fue en Sídney 2000 “En nuestro deporte se realiza una clasificación continental, en Bogotá Colombia, logré la clasificación en dobles con Liu Song. Fue increíble, grandioso, estar en Australia, vivir el clima de juegos, los nervios, me acuerdo el momento de entrar al estadio en esa fiesta inaugural”, agrego Pablo.

En Atenas 2004, su segunda cita olímpica clasificó en dobles junto a Oscar González: “él me enseñó mucho, lo disfruté, ya conocía el clima previo. Fue más grato en cuanto a lo deportivo, cumplimos un sueño de jugar junto a él”, destaco el gran maestro.

De su tercer Juego Olímpico, en Beijing 2008, comentó: “A los Juegos Olímpicos los organizas en el medio del desierto y a cualquiera le va a encantar, tuvo una importancia muy grande, los chinos se lucieron en cuanto a organización y juegos. Convocó mucha gente el tenis de mesa. Extraordinario en todo sentido. Los Juegos Olímpicos tienen un brillo muy especial”.

El sanjuanino es el argentino que más se destacó en el tenis de mesa a nivel internacional. El atleta de Alto Rendimiento de la Secretaría de Deportes, participó en siete campeonatos Panamericanos y logró seis medallas. Es el argentino que más preseas tiene en este deporte.

En el año 1995 debutó en sus primeros Juegos Panamericanos en Mar del Plata, y logró, junto al bonaerense Martín Paradela, la primera medalla de plata para el tenis de mesa en el país. “Fue un recuerdo muy lindo, profesionalizó nuestro deporte, se hizo una apuesta fuerte en dobles. Éramos locales, fue muy especial, sirvió la medalla para que creciera en la consideración de autoridades”, contó Pablo.

Luego llegó su segunda participación en Winnipeg, Canadá, en el año 1999. Obtuvo su segunda medalla de plata, esta vez por equipos. “En este caso competí con Liu Song por equipos, íbamos más confiados. Cargábamos con la responsabilidad de ganar una medalla por lo hecho anteriormente”, agregó. En el año 2003 en Santo Domingo, República Dominicana, logró ganar medalla de bronce. Esta vez compartió dupla, otra vez, con Liu Song. “Éramos candidatos a medalla de oro y se nos escapó”, comentó.

En Río de Janeiro 2007 y en Guadalajara 2011 ganó medalla de plata por equipos. En el año 2015 estuvo presente en sus sextos Juegos Panamericanos en Toronto, Canadá, pero no pasó de los cuartos de final. En el año 2019 se colgó una medalla de plata en dobles. “Me costó la idea de estar otra vez en los Juegos, me había ido mal en Toronto. Pero llegué en un gran nivel a los juegos, en lo previo fue complicado, igual mi mujer me convenció, me dijo que valía la pena intentarlo, y la satisfacción fue increíble”, contó.

En otra de sus facetas, Pablo es abogado, carrera que soñó desde niño y pudo volver una realidad hace más de una década. Comenzó a estudiar en la Universidad Nacional en Mendoza en el año 1997 y egresó en el 2007. “Tengo un grupo de grandes amigos en Mendoza, formé un grupo muy lindo, los visito y nos visitamos. No extrañaba mucho a mi familia porque la veía seguido”, comentó Pablo.

Los números hablan por sí solos, Pablo es un histórico del tenis de mesa sanjuanino y un emblema nacional, cosechó 14 títulos a nivel nacional, participó de siete Juegos Panamericanos con el logro de seis medallas, cinco plateadas y una de bronce; y nada menos que tres participaciones olímpicas: Sídney 2000, Atenas 2004 y Beijing 2008.

Para ponerle un cierre increíble a su fantástica carrera, la Federación Argentina de Tenis de Mesa realizará un emotivo homenaje, a pocos días de que Tabachnik confirmara su retiro de la actividad profesional. Desde ayer 16 de diciembre, y hasta el 20, en el CeNARD se llevará adelante el Abierto de la República. Es por eso que la FATM decidió que el certamen se llame Pablo Tabachnik, en un merecidísimo homenaje para uno de los pioneros de la disciplina en nuestro país.

Modificado por última vez en Viernes, 17 Diciembre 2021 13:00