Esta semana, el superintendente general de Irrigación de Mendoza, Sergio Marinelli, estuvo en San Juan con la finalidad de avanzar en proyectos conjuntos en pos del fortalecimiento mutuo, para un manejo sustentable del agua. Es esta zona del país donde el recurso es siempre escaso.
La línea de trabajo estuvo planteada por una reunión, coordinada por el secretario de Agua y Energía, Ramiro Cascón. En representación del Centro Regional de Agua Subterránea del Instituto Nacional del Agua (INA CRAS) asistieron Raúl Tello, Romina Batistella, Irene Ortega, Leandro Salvioli y Gerardo Cabrera. Mientras que por la parte mendocina, Santiago Ruiz fue el representante. El Departamento de Hidráulica, estuvo representado por Giovanna Argento de Planificación Hidrológica y Néstor Herrera de Aguas Subterráneas.
El funcionario mendocino destacó algunas de las fortalezas de San Juan como la labor realizada por el Centro Regional de Agua Subterránea del Instituto Nacional del Agua (INA CRAS), organismo que ha desarrollado un estudio muy completo y muy complejo sobre los acuíferos en muy poco tiempo. También mencionó nuevos desafíos que implican más y mejores estudios. En esta línea, se proponen trabajar en ciertos temas “de manera conjunta con el INA CRAS a los efectos de completar esos estudios que nos están faltando para tener políticas de agua a largo plazo, que hagan más efectivo el uso del agua de los acuíferos, con la sostenibilidad que se necesita para no caer en la sobreexplotación”, expresó Marinelli. Agregó que es necesario recuperar acuíferos que están con algún grado de contaminación por salinidad, como también evaluar la posibilidad de guardar el agua de reúso en el acuífero, para el cual hay que tener un profundo y certero conocimiento.
Los equipos continuarán reuniéndose, inclusive en la vecina provincia, para estudiar y elaborar estrategias conjuntas que puedan mitigar los efectos de la crisis a través de la correcta administración del recurso hídrico.
Proyección a largo plazo
El superintendente dijo que ya cuentan con el informe respecto de cuál va a ser la proyección de la oferta al 2030, 2040, 2050. “Todo indica que va a seguir habiendo variabilidad climática, puede haber años buenos, pero la oferta va a decrecer, al menos en los ríos de Mendoza, entre un 8% y un 20%. Va a pasar lo mismo con los acuíferos. En nuestro caso, como en San Juan, la mayoría de los acuíferos son de fuente nival. Entonces, lo que tenemos que ver es de qué forma somos más eficientes y nos adaptamos a esas nuevas ofertas decrecientes, en una demanda que seguramente va a ser mayor, porque va a haber más temperatura, va a haber más gente y más demanda de alimentos”, finalizó.
