En un hito histórico para la provincia de San Juan y el país, las funcionarias policiales se han convertido en las primeras mujeres en desempeñarse como choferes en dos áreas clave de la Policía: Carolina Paredes como conductora de camiones hidrante y autobomba y Gabriela Guzmán, como chofer de colectivo de larga distancia.
Este logro es el resultado de años de dedicación y esfuerzo por parte de estas dos mujeres, quienes han demostrado su valía y habilidades a lo largo de sus respectivas carreras dentro de la fuerza policial.
Carolina, reviste la jerarquía de Cabo. Ingresó a la institución hace 8 años, actualmente se desempeña en el Destacamento de Bomberos N°5 - Caucete; con una amplia experiencia en este ámbito. Ha sido pionera al asumir el rol de chófer de autobomba. Su trabajo consiste en trasladar rápidamente el vehículo a los lugares de emergencia para garantizar un suministro de agua adecuado en situaciones de incendio, asimismo cumple cualquier función en intervenciones. En base a los registros, es el primer chofer de este tipo en la provincia.
Por otro lado, Gabriela, con 11 años de antigüedad, es Cabo y es destacada por su desempeño y habilidades al volante. Su designación como chofer de colectivo de larga distancia, se suma al reconocimiento de su capacidad para manejar vehículos de gran porte y asegurar viajes seguros y confortables en los traslados de los integrantes de Banda de Música y cuando colabora en el traslado de efectivos policiales para zonas alejadas. Luego de recabar información, es la primera mujer en la provincia y en el país de conducir un vehículo de esa magnitud. Además, conduce motocicletas de 1000 cilindradas en el destino al que pertenece, Departamento Secretaría General.
Ambas mujeres han logrado romper estereotipos de género en un ámbito tradicionalmente dominado por hombres, demostrando que la igualdad de oportunidades es fundamental para el desarrollo de una sociedad justa e igualitaria.
La designación como chóferes en estos vehículos de gran importancia resalta la confianza depositada en ellas por parte de las autoridades policiales y la valoración de su profesionalismo y cualidades personales.
Esto no solo celebra los logros individuales, sino que también abre nuevas puertas para las mujeres en la Policía de San Juan y promueve la diversidad y equidad de género en el ámbito laboral; demuestran que el desempeño exitoso en cualquier área no está limitado por el sexo, sino por el talento y el esfuerzo personal.
Ellas inspiran a futuras generaciones, les muestra que no hay límites para alcanzar sus metas y desempeñarse en cualquier profesión que elijan.
