Con mucha satisfacción Fabián Videla, formador de payamédicos, cuenta: “Hemos vuelto en marzo de 2023 a agenciar (es decir venir al Hospital) los viernes y sábado en diferentes horarios. La organización de Payamédicos está centrada en Buenos Aires y desde allí se decidió esta reactivación. Nosotros pedimos autorización al Hospital para volver después de la Pandemia y es un agrado poder volver a hacer la parte emocional y de risoterapia con la gente, con los pacientes y con cada persona del hospital, porque nuestra tarea no es solamente para los pacientes internados. Ahora estamos haciendo cursos, nos estamos capacitando en payamedicina, en payateatralidad, los chicos hacen payaresidencia en el hospital para poder ejercer”.
Payamédicos empezó en el año 2002 en Buenos Aires fundado por el psiquiatra Dr. José Pellucchi, quien se inspiró en la película basada en la vida de Patch Adams. De ahí se fue extendiendo hacia todas las provincias y en San Juan se fundó en el 2012. “Estamos en el Hospital, vamos también a clínicas, escuelas, geriátricos, hacemos paseos y demás. La idea es poder ayudar el aspecto emocional principalmente. Actualmente somos 22 payamédicos activos, según un censo que se toma mes por mes, y tenemos 42 alumnos inscriptos”, aporta Fabián.
Payamédicos está destinado a todo el público, sólo se exige el secundario completo. En un principio estaba integrado solamente por médicos y enfermeros. Luego se entendió que era difícil llevar adelante las dos tareas a la par y se abrió al público, “tanto que hoy tenemos psicólogos, pediatras, enfermeros, personal de limpieza, se van uniendo a Payamédicos todo tipo de gente porque estamos para ayudar. Mientras se quiera ayudar y salga del corazón, son todos bienvenidos”.
La corriente iniciada por el Dr. Pellucchi prendió rápido y derramó su idea a todo el país, y Fabián lo refrenda: “Se nos enseñó que con la risoterapia y el trabajo en la parte emocional se puede llegar al paciente, la sonrisa es lo fundamental que tiene el payamédico, siempre andamos con una sonrisa y buscamos la sonrisa en el otro, porque a los pacientes los ayuda a aliviar o mejorar su padecimiento. Todos nuestros disfraces, los costos para trasladarnos, todo lo solventa cada uno. Nosotros no podemos pedir nada a nadie, no estamos para pedirle al otro sino para dar, es un concepto fundamental del payamédico”.
La formación de un payamédico
La capacitación para ser un payamédico dura casi un año, se divide en tres etapas: la primera es la payateatralidad, es la parte teatral y emocional; la parte de risoterapia, son tres meses con asistencia todos los sábados y por último la Payamedicina, donde se aborda la parte ética, todo lo que puede y no puede hacerse dentro del hospital. Luego viene la payapasantía, que dura seis meses para empezar a ejercer el rol de payamédico en el hospi. Después de todo esto tienen un acto donde se les entrega el diploma de payamédico.
Tenemos actualizaciones todos los meses en los cuales hacemos ejercicios que nos ayudan a trabajar nuestra parte interna, a cuidar nuestra parte emocional para poder dar esa sonrisa. Todos los meses nos encontramos para trabajar eso. En el curso cada uno va sacando “su doctor”, encontrarle un nombre, una voz, la ropa que se va a poner, nada es dado al azar, es una búsqueda y una creación interna de cada uno.
Realizamos seguimiento de los pacientes, tenemos un cuaderno que nos sirve de guía, donde hacemos un seguimiento de cada paciente y si es necesario mantener un contacto por fuera de payamédicos, fuera del hospital, para reforzar el costado emocional, así ha pasado que tenemos pacientes que seguimos visitando. No hay un límite de edad, agenciamos con niños, adultos, ancianos, con médicos, enfermeros y personal del hospital.
Al principio costó que se entendiera nuestra tarea, hoy tenemos la aceptación de casi todo el “Hospi”, siempre con la aceptación de cada médico en las guardias o en las salas a las que vamos, siempre hay buena disposición para recibirnos y van comprendiendo la otra parte, que con una sonrisa podemos sacar de un momento de dolor al otro, al menos un instante, y eso ayuda. A veces los médicos nos buscan, nos piden que veamos un paciente en especial, hay un médico oncólogo que nos pide que estemos cuando se le hacen las quimioterapias a los pacientes y él se ha puesto contento porque ve muchos cambios en los pacientes. Los médicos nos reciben, nos aceptan y nos van indicando los pacientes que consideran hay que visitar.
A veces no sólo perdura el vínculo con los pacientes, sino que terminan siendo payamédicos. Una vez que les dan el alta nos buscan y piden ser payamédicos. Vieron que es una tarea que a ellos les hizo bien y quieren ayudar al otro. Tenemos a familiares de pacientes que fallecieron en el hospital y hoy son payamédicos, mamás que perdieron a sus hijos y son payamédicos, se integran mucho.
Una vez que te recibiste de payamédico poder irte y volver cuando quieras, porque hay que hacerlo desde el corazón y desde el tiempo que uno tenga. Desde el 2012 hasta la fecha han surgido 139 payamédicos, hoy hay 22 activos pero todos pueden volver cuando quieran.
Cómo contactarse con Payamédicos:
Para contactarnos en redes sociales: "Payas en San Juan es nuestro Facebook, payamedicosensanjuan es el Instagram Ahí pueden contactarse con nosotros para acercarse, integrarse a Payamédicos y conocernos".
