A partir del inicio de la pandemia de COVID-19 y en el marco de la situación sanitaria actual de la provincia, el Ministerio de Desarrollo Humano y Promoción Social ha tenido un rol preponderante en la contención las familias que habitan en las diferentes zonas de bloqueo, establecidas conformen a disposiciones del Comité Operativo de Emergencia (COE).
La contención y asistencia referida no es solo material, sino que desde el Gobierno de San Juan se brinda apoyo total a las familias aisladas por casos positivos. Este sostenimiento y presencia estatal está relacionado con la articulación interministerial, controlando el cuidado de la salud integral del ciudadano, atendiendo sus necesidades materiales con la provisión de insumos de higiene, seguridad y alimentarios, bajo la vigilancia y el control de las fuerzas de seguridad.
En ese sentido y producto de la experiencia adquirida en el abordaje territorial, se advierte que en algunas familias, en los que se ha detectado casos de COVID-19 positivo, cohabitan adultos niños, niñas y adolescentes.
Estas situaciones particulares conllevan un grado de complejidad, producto del encierro prolongado, al cual se suma el hecho de saber o intuir que alguno o algunos de los habitantes de ese hogar tengan coronavirus.
En tal sentido, y en el marco de las facultades y prerrogativas que otorga a la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia (DNAyF) la Ley 26.061, se creó una red de contención vía telefónica para las familias que se encuentran cumpliendo el aislamiento en las zonas de bloqueo de los distintos departamentos de la provincia, destinado el mismo a los niños, niñas y adolescentes que moren en dicha vivienda.
Esa contención estará a cargo del equipo de profesionales pertenecientes a la dirección, integrado por por licenciados en Psicología, en Trabajo Social y de otras profesiones que forman parte de los distintos programas de la DNAyF.
El objetivo principal es la contención emocional de los niños, niñas y adolescentes de cada domicilio, tendiente a garantizar la promoción y protección integral de sus derechos, proporcionando apoyo, escucha activa y facilitando a la expresión de los sentimientos y situación actual, a los efectos de advertir el estado en el que se encuentran.
Es un servicio esencial que se suma a lo que ya viene realizando el Gobierno provincial con las familias con casos positivos, pero apuntando firmemente a sostener los derechos de cada niño, niña y adolescente en esta situación de vulnerabilidad por la pandemia actual.
