El miércoles 26 de julio se llevó a cabo un torneo de ajedrez dirigido a los centros en recuperación de adicciones que el programa Incluime interactúa semanalmente que son: Proyecto Juan, María del Carmen, El Faro.
El mismo fue organizado por los profesores Matías Martin y Gisela Varela, coordinado y supervisado por el equipo de Coordinación de Incluime, Débora Kaluza, Fernando Sánchez y Agustín Salas, dicho programa forma parte de la Dirección de Políticas Educativas e Inclusivas de la Secretaria de Estado de Deportes de San Juan.
Este encuentro se realizó en conmemoración al día Mundial del Ajedrez que fue el pasado 20 de Julio, la práctica de ajedrez puede tener varios beneficios para personas en proceso de recuperación de adicciones, aunque no es una solución única o sustituto para el tratamiento profesional, el ajedrez puede ser una herramienta complementaria que contribuya positivamente en este proceso.
Algunos de los beneficios incluyen:
- Fomento del enfoque y concentración: El ajedrez requiere concentración y atención en cada movimiento, lo que puede ayudar a quienes están en recuperación a desarrollar habilidades para enfocarse en el presente y evitar distracciones que puedan conducir a recaídas.
- Reducción del estrés y la ansiedad: La práctica del ajedrez puede ser una actividad relajante que ayude a reducir el estrés y la ansiedad, factores que pueden estar relacionados con el proceso de recuperación.
- Desarrollo de habilidades de resolución de problemas: El ajedrez es un juego que demanda pensamiento estratégico y táctico, lo que puede ayudar a las personas en recuperación a desarrollar habilidades para resolver problemas y tomar decisiones más racionales y consideradas.
- Estimulación cognitiva: Jugar ajedrez puede ayudar a mantener la mente activa y estimulada, lo que puede ser especialmente útil para aquellos que buscan reconstruir sus habilidades cognitivas después de los efectos de las adicciones.
- Aprendizaje de la paciencia y la toma de decisiones reflexivas: El ajedrez es un juego que requiere paciencia y reflexión antes de realizar un movimiento. Esta capacidad de tomarse el tiempo necesario para tomar decisiones puede ser valiosa en el proceso de recuperación.
- Construcción de habilidades sociales: Jugar ajedrez puede ser una actividad social que fomente la interacción con otros jugadores, lo que puede ser especialmente útil para quienes buscan reconstruir su red social después de una adicción.
- Incremento de la autoestima: A medida que las personas avanzan en su práctica y mejoran en el juego, pueden experimentar un aumento de la autoestima y la confianza en sí mismos, lo que puede ser esencial en el proceso de recuperación.
- Ocupación del tiempo libre: El ajedrez puede ser una actividad entretenida y enriquecedora que ocupe el tiempo libre, evitando caer en situaciones de ocio propensas a recaídas.
Es importante tener en cuenta que, aunque el ajedrez puede ser beneficioso en el proceso de recuperación, la adicción es una enfermedad compleja que requiere un enfoque integral, que puede incluir terapias profesionales, apoyo social y otros recursos, es por eso que desde el programa “Incluime” otorga esta herramientas a estos centros para brindar un apoyo a las personas que asisten a estos centros.
