San Juan es parte del Mapa Federal de Experiencias de Varones y Masculinidades

Se trata de una iniciativa comunitaria que nace en el Centro de Salud Aldo Hermosilla, en el departamento Pocito.

San Juan, a través del Ministerio de Salud Pública, actualmente forma parte del Mapa Federal de Experiencias de Varones y Masculinidades, intentando reformular y resignificar la representación social de la masculinidad a través del abordaje terapéutico, creando espacios de reflexión en el campo de violencia intrafamiliar y género.

La iniciativa comunitaria se enmarca bajo el Ministerio de las Mujeres, Género y Diversidad de Nación para poder aplicar este proyecto se contó con el respaldo y autorización de la jefatura zonal V, a cargo de la Dra. Ivana Garzón.

La Lic. Ana Grynszpan, es la impulsora de la iniciativa comunitaria y psicóloga de profesión, que se desempeña junto a un equipo interdisciplinario en el Centro de Salud Aldo Hermosilla y es ahí en donde los varones son derivados por el Juzgado de Paz del departamento Pocito para ser atendidos.

Según la profesional, "entre los objetivos que figuran en la iniciativa comunitaria podemos citar a: reformular y resignificar la representación social de la masculinidad en el área necesaria a través del abordaje terapéutico de los estereotipos sociales y culturales a los que se asignan roles específicos; reconstruir nuevas modalidades interaccionales de la masculinidad sana, afectivizando vínculos íntimos y familiares (hijos, esposa, parejas, docentes, etc.); promover la disponibilidad de las redes de contención para hombres con dificultades en el control de impulsos y reconocimiento de sus emociones entre otras".

"Generalmente al centro de salud concurren para realizar psicoterapias más mujeres y niños, mientras que el varón no, siempre está trabajando o por diversas razones no se acerca para realizar psicoterapia". La profesional cita en su relato a Sergio Sinay, quien es ensayista y especializado en vínculos humanos. Este autor sostiene que la masculinidad no los deja llegar a la terapia, si a la mujer.

En tal sentido, la licenciada comenta que la iniciativa tiene principalmente una articulación y relación directa con el Juzgado de Faltas. “A mí me llega un oficio judicial, en donde la persona es derivada para un tratamiento psicoterapéutico”, comenta.

El abordaje está orientado a la familia y a la mujer, pero es necesario que se tome al varón, en una situación de violencia por parte del hombre es imperioso trabajar con él, porque hay que buscar nuevas formulaciones de la masculinidad. Culturalmente está mal visto que el hombre llore, o exprese sus sentimientos y emociones, la posibilidad de reflexionar, arrepentirse, crear nuevos hábitos, etc. Esta tarea es imposible de realizar si no se cuanta con un equipo de trabajo y colegas como el Lic. Ignacio Gómez, que atiende algunos casos conmigo.

El trabajo al principio es duro, al varón le cuesta mucho desenvolverse, mostrarse, pero después de esa primera instancia el vínculo es espectacular, se sensibiliza, aparece la empatía. Es un trabajo complejo que implica volver a formular todos los mitos y prejuicios en torno a lo que es ser hombre hoy, si se es más o menos hombre por haber hecho o generado tal situación conflictiva que termina en violencia.

Desde la perspectiva de género, la mujer puede llegar y a hacer una reflexión, modificar, hábitos, como también empoderarse, pero es necesario que el hombre también lo haga para que sea un cambio conjunto en lo social. Por último, la profesional afirmó que el trabajo de la masculinidad, también es una manera de ayudar a la mujer y que es necesario buscar consensos.

Modificado por última vez en Viernes, 13 Agosto 2021 11:34