La Sala de Bioestadísticas es una dependencia del Ministerio de Salud Pública que recaba y recibe información y datos provenientes de nivel sanitario del Estado provincial, ya sea de un servicio de un hospital o la cantidad de consultas médicas realizadas, solo por dar un ejemplo.
Esta información es presentada a las máximas autoridades, “pero no se trata de dar solo información”, asevera la Lic. Rodríguez, quien está a cargo de la dependencia y es socióloga de profesión. Rodríguez considera que a partir de esta información se pueden crear indicadores sanitarios, elaborar diagnósticos y poder planificar, al igual que realizar monitoreos y tomar decisiones oportunas.
Las informaciones provienen de todos los efectores e incluso de los hospitales descentralizados Dr. Guillermo Rawson y Dr. Marcial Quiroga. También se trabaja con los equipos de las cinco zonas sanitarias y hay que destacar que el ministerio recientemente está articulando con las clínicas privadas, un hecho importante porque permite tener conocimientos de la salud de todos los ciudadanos.
“Un nexo muy interesante es poder articular con otros ministerios y otras aéreas de gobierno”, dice Julieta Chalom, otra socióloga que integra el equipo.
Además se suma Bioestadística, que tiene que ver con los hechos vitales, es decir nacimientos, defunciones, la parte estadística de servicios con egresos y consultas ambulatorias a lo cual se agrega la morbilidad, procesos de enfermedades que permite elaborar indicadores de morbimortalidad y de hechos vitales.
Chalom comentó que con la Dirección Provincial de Informática (DPI), articulan acciones y se cuenta con la disponibilidad de recursos tecnológicos para que Salud pueda armar sus plataformas de cargas, tableros de comandos, etc.
Ahora en pandemia están en su máximo funcionamiento los sistemas de cargas digitales para tener la información en tiempo real.
“Se pasó de estar construyendo indicadores anuales a reducirlos a trimestrales, se han sectorizado a través de zonas sanitarias, cada vez más focalizados. Veníamos de una cultura más macro a algo más especifico, reduciendo el tiempo, y esto permite tomar decisiones cuya dinámica es mucho más acelerada”, dijo la Lic. Rodríguez.
“Se han incorporado nuevas herramientas tecnológicas como la georreferenciación; esto permite geolocalizar a través de coordenadas de mapa para la ubicación de una vivienda, algo que en los rastrillajes por el COVID-19 se está utilizando. Felizmente esto lo teníamos armado y acondicionado antes del inicio de la pandemia, teníamos todo el sistema armado e incluso el recurso humano capacitado”, contó la Lic. Chalom.
“Las profesionales remarcaron que todas las aéreas puedan utilizar la información, hacemos una actividad muy fuerte con la Dirección de Materno Infancia, Dirección de Planes y Programas, con Epidemiología, con Atención Primaria de la Salud y con todas las áreas que lo requieran. Obtenemos mucha información que permiten elaborar indicadores, es decir ese número que te permite decir algo sobre la realidad una situación en particular (tasas, porcentajes, índices) y lo más importante que las autoridades tomen decisiones.
