Este festejo se desarrolló en varias ciudades de Argentina, sin embargo San Juan fue una de las provincias base en esta gran fiesta. El objetivo fue continuar instalando esta bebida desde el aspecto cultural y productivo en la comunidad sanjuanina.
La propuesta de actividades incluyó: degustaciones de vinos y productos regionales, espacio gourmet, espectáculos musicales, sorteos sorpresas, patio de comidas, entre otras.
En la Plaza del Bicentenario desde las 19 horas y hasta pasada la medianoche los sanjuaninos pudieron celebrar el día de la bebida emblemática de Argentina. En esta edición participaron 20 bodegas sanjuaninas que dieron a degustar al público los mejores vinos de nuestra tierra.
Por su lado, el espacio gourmet incluyó a 13 emprendimientos de San Juan que expusieron y dieron de degustar quesos, aceitunas, aceites de oliva y delicatessen. Además, los presentes se deleitaron con una especial crema helada de malbec preparada por una reconocida heladería local.
A las 21 horas el Vicegobernador de la provincia, doctor Marcelo Lima junto con el Ministro de Producción y Desarrollo Económico, licenciado Andrés Díaz Cano y el presidente de la COVIAR, Ángel Leotta encabezaron el brindis con el resto de las autoridades provinciales, referentes de las cámaras e instituciones vitivinícolas y con toda la comunidad sanjuanina que se hizo cita en este gran festejo.
Acto seguido, para acompañar las diversas actividades culturales se sumó el sector artístico con la participación de músicos sanjuaninos que interpretaron una amplia variedad de canciones de diferentes géneros musicales. El grupo folclórico Raíces de Guadalupe abrió la noche con una selección de música cuyana. Luego fue el turno de la joven voz de Carla Tello que eligió una variedad de música popular, que hasta incluyó un tango.
A continuación Aldo Zaragoza y su banda hicieron aplaudir y cantar a los presentes con canciones de rock nacional. Y, el gran cierre estuvo a cargo de la Camerata San Juan que interpretó un exquisito y variado repertorio.
En el año 2010 se firmó el Decreto Nacional Nº 1800 y, tres años después, se promulgó la Ley Nacional Nº 26.870, en ambas legislaciones se declara al vino argentino como bebida nacional. Entre los objetivos de la ley se establece la difusión de las características culturales del vino argentino, promoción del desarrollo de las economías regionales a partir de actividades relacionadas con el sector vitivinícola, entre otros tópicos que fomentan la producción, elaboración y consumo vino.
