Desde inicios del 2020, se mantienen reuniones con autoridades del gobierno de Alberto Fernández para convenir la reactivación de obras que formaron parte de los proyectos cloacales que tenían el compromiso de recursos de Nación en la administración anterior.
La gestión tuvo en cuenta dos frentes de trabajo que comenzaron en abril de 2018 y que, por la falta de avance, uno tiene menos del 5 por ciento de ejecución y el otro, cerca del 20%. Se trata de la red de Rivadavia y la de la villa cabecera de Valle Fértil que benefician, entre ambas obras, a más de 27 mil personas. Además se consiguió el compromiso para que se aceleren las construcciones de los acueductos Gran San Juan y Tambillo, en Iglesia.
El acuerdo tiene como finalidad firmar nuevos convenios ya que, como menciono el ministro Ortiz Andino, “los acuerdos tienen plazos viejos, convenios vencidos y deudas”. De esta manera, serían destrabados conflictos contractuales y de documentación con las empresas para que se reactiven los trabajos.
Se anuncio además, que se prevé para agosto el llamado a licitación para la tercera fase de las cloacas de Jáchal, la cual tiene un costo de unos 480 millones de pesos que aportará íntegramente el Ente Nacional de Obras Hídricas y Saneamiento (Enohsa).
En cuanto a los acueductos Gran San Juan y Tambillo, en Iglesia, Nación se comprometió a pagar las redeterminaciones de precios para posibilitar el avance de las obras.
