Los inspectores de Saneamiento del Medio, del Ministerio de Salud Pública, son los responsables de controlar el cumplimiento del protocolo en cada pileta climatizada de la provincia.
Son seis establecimientos habilitados, de los cuales cuatro están trabajando con todos los lineamientos sugeridos por la cartera sanitaria y solo a dos les falta renovar la inscripción. Una vez que lo hagan, podrán desempeñar su función sin problema.
El profesional de la salud completa en cada establecimiento un acta de inspección donde se deja constancia del acatamiento a las medidas sanitarias. En ellas, supervisan si el personal estable cuenta con cubrebocas, si se dispone de cartelería sugerida, alcohol en gel y toalla para los clientes; controlan el área seca para calentamiento de nadadores, exigencia para cada deportista de los kits de aseos personales, distanciamiento entre sillas, entre otros.
Al final de la visita, el acta es rubricada por cada inspector con la firma del titular o encargado de la pileta.
El jefe del departamento de Medicina Sanitaria, Dr. Roque Elizondo, a cargo también de Saneamiento del Medio, sostuvo: “Hasta el momento hemos comprobado que se cumple estrictamente el protocolo. Además el propietario responde un breve cuestionario de nuestros inspectores sobre detalles que hacen a su trabajo en las piletas, como la cloración del agua” expresó el funcionario.
Elizondo contó que la dependencia emplea métodos químicos para constatar la correcta desinfección de bacterias y organismos patógenos.
La cantidad de normas que deben constatar los inspectores son considerables, porque para esta actividad el protocolo contiene varios ítems a cumplir. Estos incluyen generalidades, lugares de entrenamientos, ingreso y egreso, baños y vestuarios, desinfección y ventilación de los ambientes.