El grupo de adolescentes no dudó en participar con su arte y espectáculo que contagió con carisma y alegría al público presente que bailó y cantó estribillos de este género musical nacido en los 90.
El ministerio propuso que la tercera noche de la FNS estuviera destinada a los jóvenes adolescentes, para trabajar a través de consejerías en prevención y promoción de la salud. “Nos pareció propicio que este grupo de artistas participara de forma activa en su noche”, dijo uno de los organizadores que también coreó las improvisadas rimas de Ignacio Carrizo y de Aldo Stordeur, por mencionar solo algunos de estos chicos que comparten horas tras horas de ensayo en las plazas conformándose según ellos en una “familia”.
“Ser invitados a la FNS nos ayuda a posicionamos y a que la gente nos conozca más y que nos tengan en cuenta”, dijo uno de los raperos.
Existe mucho prejuicio en la sociedad acerca del trap, por la forma de vestirse, los peinados, tatuajes o pantalones anchos. Lejos del estilo, el propósito es llevar un mensaje de cómo interpretan y ven a la sociedad desde su visión de jóvenes.
Frescos y desinhibidos, así se mostraron y dijeron: “Muchas veces en la calle no somos mirados o mal mirados también, pero cuando nos escuchan les sacamos una sonrisa, eso es lo que nos llena a nosotros”.
