Estuvo en el Destructor ARA Piedrabuena y viajará a las Islas Malvinas

Es René Mazzochi quien dijo “creo que con este viaje cerramos una etapa de la vida, no las heridas”.

René Fabián Mazzochi estuvo a bordo del Destructor Piedrabuena, nave acompañante del Crucero Belgrano junto con el ARA Gurruchaga e integra el quinto contingente de veteranos y familias de caídos de Malvinas que viajarán a Malvinas gracias al Gobierno de la provincia.

Su familia está compuesta por su esposa Liliana y sus hijos Fabián, Pablo y Florencia, que es la más chica de la casa.

“Después del hundimiento del Belgrano, el Piedrabuena se convertiría en uno de los primeros en llegar a la zona y comenzar con el rescate, tarea a la que sumarían el ARA Gurruchaga, el ARA Bahía Paraíso y el destructor ARA Bouchard. Pasamos a ser prácticamente un barco rescatista, logramos rescatar 191 tripulantes más dos muertos”, recuerda Mazzochi.

“Yo era personal de cuadro, cabo segundo maquinista pertenecía máquina de popa en ese momento en el destructor. Las expectativas de este viaje es ir a conocer, a pisar nuevamente por lo que peleamos, por lo que defendimos. En esa época los que estábamos embarcados vimos las Malvinas a 400, 500 o 600 metros, pero no la pisamos. Pasamos por todos los momentos graves que se puede pasar en una guerra estando en un barco, desde el que torpedearon el Crucero incluyéndonos a nosotros y al Gurruchaga que por suerte no nos dieron igual, y pasamos todas las que debimos pasar, y después nos convertimos en rescatistas siendo los primeros en llegar a los lugares de rescate”.

El hombre agregó que “años anteriores he tenido la oportunidad de hacer este viaje, pero no estaba convencido, y hoy en día, no sé si por qué ya estamos más grandes, más viejos o por consejo de los compañeros, incluyendo el médico que me aconsejaron, voy”.

Finalmente, el veterano agregó que “el consejo es hacer el viaje, así que viajo para para cerrar una etapa, una etapa de mi vida que creo que todos los vamos cerrando a medida que nos vamos poniendo viejos. Cerramos una etapa de la vida, pero no las heridas y creo que nos cuesta mucho más, hoy en la puerta de los 60 años que cuando en aquel momento recién estábamos entre los 20 o 18 años”.

Modificado por última vez en Miércoles, 11 Marzo 2020 16:37